“Es tiempo de eliminar el cáncer de cuello uterino”.
En el contexto del aseguramiento en Colombia, 24.689 colombianas han sido diagnosticadas con cáncer de cuello uterino
- Según las estimaciones de GLOBOCAN para el año 2020, América Latina y el Caribe ocupó el segundo lugar en incidencia y mortalidad por cáncer de cuello uterino a nivel mundial, con 59.439 casos nuevos y 31.582 muertes.
- En el marco del aseguramiento en Colombia, durante el último periodo analizado, más del 70% de los casos nuevos reportados (CNR) fueron invasivos.
- El 81% de los CNR invasivos estadificados, se diagnosticaron en etapa tardía, representando un reto importante para reforzar las estrategias de detección temprana, así como el logro de las metas de tamización y manejo de lesiones precursoras.
Bogotá, D.C. 23 de marzo de 2021
Con el lema “Es tiempo de eliminar el cáncer de cuello uterino”, la Cuenta de Alto Costo (CAC) se une el 26 de marzo a la conmemoración del día mundial de esta enfermedad. El objetivo es generar conciencia en la población con respecto a la prevención, el diagnóstico y el tratamiento oportuno de la enfermedad, teniendo como factor causal necesario la infección persistente por el virus del papiloma humano (VPH).
Debido a que el cáncer de cuello uterino es considerado un problema de salud pública a nivel global y dado su carácter preventivo, la Organización Mundial de la Salud (OMS), lanzó la estrategia mundial hacia la eliminación de esta enfermedad, con el objetivo de reducir la incidencia por debajo de 4 casos nuevos por 100.000 mujeres, estableciendo tres metas prioritarias para que sean cumplidas en todas las naciones para el año 2030:
- Cobertura de vacunación contra el VPH mayor al 90% en niñas a la edad de 15 años
- El tratamiento, como mínimo, del 90% de las mujeres con lesiones cervicales
- Coberturas de tamización en dos rondas (35 y 45 años), mayores al 70% con pruebas altamente sensibles
En el aseguramiento en Colombia, durante el periodo comprendido entre el 2 de enero de 2020 y el 1º de enero de 2021, el cáncer de cuello uterino fue el segundo en frecuencia en las mujeres con 2.050 casos nuevos reportados (CNR) y 1.591 muertes. En total, son 24.689 las mujeres colombianas diagnosticadas con este tipo de cáncer; la proporción de casos nuevos reportados (PCNR) ajustada por la edad para el mismo periodo fue de 6,04 casos por 100.000 mujeres.
El 76% de los CNR corresponde a casos de cáncer de cuello uterino invasivo.
En cuanto a la extensión de la enfermedad, tanto los CNR como los prevalentes fueron en su mayoría, tumores invasivos.
El 97% de las muertes ocurrieron en mujeres con este tipo de cáncer ocurrieron en aquellas con tumores invasivos.
Lo anterior representa información clave para orientar las acciones de los aseguradores y de los prestadores hacia la meta de eliminación del cáncer de cérvix.
Comportamiento del cáncer de cérvix en el aseguramiento en Colombia
Al observar el comportamiento de la morbimortalidad del cáncer de cuello uterino invasivo en los últimos cuatro periodos, se registró una disminución del 22% en la PCNR en el último periodo, aspecto que puede estar relacionado con las barreras de cobertura de los servicios de detección y diagnóstico, asociadas a la pandemia por COVID-19.
En comparación con el 2020, en el último periodo se evidenció un aumento del 31% en las muertes en las mujeres con esta enfermedad.
El 29% de los CNR se presentaron en las mujeres entre los 35 y 44 años, y el 17% entre los 20 y 34 años, lo que representa una carga de enfermedad importante en las edades productivas.
En lo que respecta a su distribución por las entidades territoriales, un gran número de casos nuevos ocurrieron en la región Central con el 24,4% y en Bogotá, D.C con el 23,8%. La proporción de CNR fue similar entre los regímenes de afiliación con un 50% de casos atendidos en el contributivo y un 48% en el subsidiado.
El diagnóstico tardío representa un reto importante en el sistema de salud, por lo que es necesario reforzar las estrategias de detección temprana encaminadas a lograr las metas de tamización y manejo de lesiones precursoras.
En cuanto a la oportunidad de la atención de los CNR, se observó un menor tiempo de espera para la confirmación diagnóstica y el inicio del tratamiento en los estadios tardíos. No obstante, es necesario mejorar los tiempos de espera para acceder a la atención en las mujeres diagnosticadas tempranamente que tienen un mejor pronóstico y evolución de la enfermedad.
La CAC evalúa la gestión del riesgo de las mujeres con cáncer de cérvix que son atendidas en el marco del aseguramiento en Colombia, con el fin de promover el acceso oportuno al manejo integral que permita el logro de mejores resultados en salud.
En este sentido, se observa una disminución en la proporción de mujeres diagnosticadas en etapas tempranas de la enfermedad que recibieron tratamiento curativo con respecto al periodo anterior, por lo que es importante continuar trabajando para avanzar hacia una mejor cobertura del tratamiento, teniendo en cuenta que el manejo oportuno impacta positivamente en la calidad de vida.
En cuanto a la proporción de CNR y prevalentes a los que se les realizó la estadificación clínica, es decir los casos en los que se identificó el tamaño y la extensión del tumor, hubo una mejora significativa en los prevalentes, con un incremento del 4%, logrando así la estadificación en el 83% de la población.
Es importante continuar trabajando para lograr que el 90% o más de los casos cuente con la estadificación clínica.
Aspectos clave para la prevención y la detección temprana del cáncer de cuello uterino
La infección persistente por el VPH de alto riesgo es una condición necesaria para el desarrollo del cáncer de cuello uterino, además de la contribución de otros factores para la progresión hacia lesiones precancerosas y carcinoma invasivo.
La vacunación contra el VPH en edad escolar, con la aplicación de dos dosis con 6 meses de intervalo antes de los 15 años, el tamizaje de cáncer de cérvix con pruebas altamente sensibles, la detección y el tratamiento de lesiones precancerosas, son estrategias vitales para evitar la progresión a estadios avanzados de la enfermedad, reduciendo así la carga social y económica asociada a este tipo de cáncer.
“Todas las mujeres debemos fortalecer nuestro autocuidado para disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino”